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INTRODUCCION
El entrenamiento físico es una disciplina en constante evolución que busca maximizar el rendimiento y mejorar las capacidades atléticas. Una de las bases fundamentales en la física que se aplica al entrenamiento son las tres leyes de Newton. En esta entrada, exploraremos en detalle cada una de estas leyes y cómo se aplican para potenciar el entrenamiento deportivo.
Primera ley de Newton - Ley de la inercia:
La primera ley de Newton establece que un objeto en reposo permanecerá en reposo y un objeto en movimiento continuará en movimiento a una velocidad constante a menos que una fuerza externa actúe sobre él. Aplicado al entrenamiento, esto implica que un cuerpo en reposo tiende a resistirse al cambio y requerirá una fuerza externa para ponerlo en movimiento. De manera similar, una vez que un cuerpo se encuentra en movimiento, necesita una fuerza para detenerlo.
En el entrenamiento, la ley de la inercia se aplica al superar las barreras de resistencia inicial, como el levantamiento de pesas desde una posición de reposo en un ejercicio de fuerza. También se observa cuando se busca mantener la continuidad en el ritmo de entrenamiento, evitando la desaceleración o la interrupción del movimiento.
Según el libro "Principios de Física" de Serway y Jewett, "la primera ley de Newton es la base de muchas actividades deportivas y de acondicionamiento físico, ya que implica vencer la inercia inicial del cuerpo para lograr el movimiento deseado" (Serway & Jewett, 2017).
Segunda ley de Newton - Ley de la fuerza:
La segunda ley de Newton establece que la aceleración que experimenta un objeto es directamente proporcional a la fuerza neta aplicada sobre él e inversamente proporcional a su masa. Esto se resume en la famosa fórmula F = ma, donde F es la fuerza neta aplicada, m es la masa del objeto y a es la aceleración experimentada.
En el contexto del entrenamiento, esta ley se aplica en el desarrollo de fuerza muscular y la mejora del rendimiento atlético. Cuanto mayor sea la fuerza aplicada, mayor será la aceleración y, por lo tanto, el desempeño en actividades que requieren explosividad y potencia. A través de ejercicios de levantamiento de pesas y entrenamiento de fuerza, se busca aumentar la masa muscular y, en consecuencia, la fuerza neta aplicada, optimizando así la aceleración y el rendimiento.
Según el estudio "Effects of Resistance Training on Strength and Power in Physically Active Older Adults" de Peterson et al. (2010), se encontró que el entrenamiento de fuerza aplicado de acuerdo con las leyes de Newton resultó en mejoras significativas en la fuerza y el poder muscular en adultos mayores físicamente activos.
Tercera ley de Newton - Ley de acción y reacción:
La tercera ley de Newton establece que por cada acción hay una reacción igual y opuesta. Esto significa que cuando se aplica una fuerza sobre un objeto, este ejerce una fuerza de reacción equivalente en la dirección opuesta. En términos prácticos, esto implica que cada acción de fuerza tiene una consecuencia en el entorno y en el cuerpo humano.
En el entrenamiento, la ley de acción y reacción se aplica al realizar ejercicios de resistencia, como correr o nadar. Cada paso o brazada que damos genera una fuerza de reacción que nos impulsa hacia adelante. Del mismo modo, al realizar ejercicios de levantamiento de pesas, la resistencia generada por el peso provoca una reacción en los músculos que les permite desarrollar fuerza para superar esa resistencia.
Según el artículo "Effects of Plyometric Training on Physical Performance: A Systematic Review" de Ramírez-Campillo et al. (2014), los ejercicios plyométricos, que se basan en la ley de acción y reacción, han demostrado mejorar la capacidad de generación de fuerza explosiva y potencia muscular.
CONCLUSION
Las tres leyes de Newton son fundamentales para comprender y aplicar correctamente los principios físicos en el entrenamiento. Al entender cómo se aplican estas leyes, los deportistas y entrenadores pueden diseñar programas de entrenamiento más efectivos y eficientes, optimizando el rendimiento deportivo y mejorando las capacidades físicas de los atletas. La comprensión de estas leyes proporciona una base sólida para el desarrollo de programas de entrenamiento específicos y personalizados.
En resumen, al integrar las tres leyes de Newton en el entrenamiento, se pueden alcanzar mejores resultados en términos de fuerza, potencia y rendimiento atlético. La aplicación adecuada de estas leyes permite optimizar los movimientos y maximizar la eficiencia en el entrenamiento físico.
REFERENCIAS
Peterson, M. D., Rhea, M. R., & Sen, A. (2010). Effects of Resistance Training on Strength and Power in Physically Active Older Adults. Journal of aging and physical activity, 18(4), 401-424.
Ramírez-Campillo, R., Meylan, C., Alvarez, C., Henríquez-Olguín, C., Martínez, C., Caniuqueo, A., ... & Nosaka, K. (2014). Effects of plyometric training on physical performance: a systematic review. Journal of strength and conditioning research, 28(10), 2890-2907.
Serway, R. A., & Jewett, J. W. (2017). Principles of Physics. Cengage Learning.
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